En tan escasa distancia sorprenderá la diversidad de parajes, atravesaremos en la subida tierras yermas para descender bajo la sombra de castaños centenarios. El inicio del recorrido se sitúa en un pequeño camino detrás del Hotel El Rincón de Yegen, mientras que paseamos por este vistoso camino observaremos los distintos cortijos algunos centenarios y otros más reciente que se funden con la Sierra. Antiguamente los cortijos servían de lugar de reposo para los agotados pastores de la Sierra que tenían libre entrada en éstos aunque no fueran de su propiedad, era un recinto con una o dos habitaciones y una chimenea en estos no había agua corriente ni electricidad. Actualmente los cortijos son auténticas casa que vecinos del pueblo tanto extranjeros como lugareños construyen únicamente para disfrutar del entorno y del paisaje de la Sierra. Siguiendo la ruta nos encontraremos con una gran balsa conocida como “La Señal”. En la que muchos vecinos del pueblo acudían para bañarse.